Uno de los principales perjuicios que siempre nos viene a la mente a la hora de invertir en mercados asiáticos es el riesgo que asociamos a dicha inversión. Ahora bien, ¿es realmente más arriesgado invertir en mercados asiáticos (exceptuando Japón) que en los mercados europeos o americanos?
A la hora de medir el riesgo de una inversión una de las mejores herramientas que disponemos es la volatilidad, la cual la podemos definir como la desviación estándar de las variaciones en un horizonte temporal específico (normalmente un año). Gracias a esta medida podemos afirmar que la inversión en un activo conlleva mayor o menor riesgo que la inversión en otro activo, en función que el activo tenga una mayor o menor volatilidad.
Por tanto analicemos las volatilidades de los distintos índices mundiales, para realmente ver que inversión conlleva más riesgo.
En la tabla adjunta están representadas las volatilidades de los principales índices desde 1990.

Según podemos confirmar con las cifras, los mercados asiáticos, representados por el MSCI AC Asia Pacific Ex Japan, realmente no son más volátiles que los mercados desarrollados, es más son 2 puntos menos volátiles que los europeos y 6 menos que el mercado Japonés.
Después de estos datos, la pregunta que nos podemos hacer, después de confirmar que los mercados asiáticos no aportan más riesgo a nuestra cartera, es: "¿consideramos los mercados asiáticos como otro activo más a la hora de componer nuestra cartera?". Si no lo estábamos haciendo, la pregunta debería pasar de ser ¿los mercados asiáticos deberían formar parte de nuestra cartera? a ¿qué parte de mi cartera deberían ser los mercados asiáticos?.